En Hortiberia sabemos que el pimiento es una verdura cuyo color y sabor cautiva a todos los paladares. Se usa en multitud de platos, desde la paella valenciana, a la que otorga color, hasta ser el ingrediente imprescindible de platos como el pisto o el gazpacho.
El pimiento es muy versátil y un buen comodín en la cocina. Se puede saltear con aceite y ajo, o bien hornearlo unos minutos para acentuar su sabor, además en verano podemos incorporarlo a ensaladas para añadir un contrate de color y sabor.
Por eso, en este post no solo os hablaremos de sus múltiples beneficios sino que además os dejamos algunos tips y recetas para que el pimiento se convierta en vuestro aliado este verano.
Beneficios, propiedades y valor nutricional
En su mayor parte el pimiento está compuesto por agua e hidratos de carbono con alrededor de 27 kilocalorías por cada 100 gramos. También es rico en fibra, vitaminas y minerales como el potasio y la vitamina C.
Gracias a las propiedades mencionadas, el pimiento tiene una serie de beneficios para nuestra salud que te pasamos a detallar a continuación:
- Beneficioso para los más pequeños: el pimiento contiene folatos, una vitamina muy favorable para los niños en edad de crecimiento para prevenir deficiencias en el organismo. También es recomendable para las mujeres en sus primeras semanas de embarazo.
- Acción antioxidante: su compuesto en selenio, vitaminas C, E, provitamina A y capsantina entre otros, hacen del pimiento un intenso antioxidante muy beneficioso para nuestro organismo.
- Rico en fibra: conocida por contribuir a la función intestinal, la fibra también nos ayudará a prevenir enfermedades relacionadas con el tracto gastrointestinal e incluso reducir el colesterol en sangre y mejorar el control de la glucemia.
- Facilita la diuresis: gracias a la escasez en sodio, y riqueza en potasio,el pimiento favorece la eliminación de líquidos y las sustancias de desecho disueltas en ella como ácido úrico y urea.
El pimiento en la cocina
El pimiento es una de las hortalizas que se ha convertido en un imprescindible de la dieta mediterránea, gracias tanto a su valor nutricional y beneficios, como a su excelente sabor.
Es importante saber que dependiendo del cocinado, sus beneficios pueden variar. Si, por ejemplo, lo consumimos crudo en una ensalada, su contenido en vitamina C será mayor, por el contrario si pasa por una cocción perderá una cantidad significativa de ella. Además, una de las ventajas que tiene el pimiento es que gracias al intenso sabor de algunas de sus variedades nos permite utilizar menos sal en nuestras comidas.
Aquí os dejamos algunas ideas.
- DIP DE PIMIENTO MORRÓN ASADO CON TOCINO
- TOSTA DE CENTENO CON PIMIENTO Y BACALAO
- AROS DE PIMIENTO AL HORNO
- PIMIENTOS RELLENOS DE CARNE Y CALABACÍN
- PIMIENTOS ASADOS RELLENOS DE CUSCÚS
- GAZPACHO DE PIMIENTOS
Recuerda que un buen pimiento debe tener la piel tersa y brillante, sin golpes, arrugas ni zonas blandas.
Puedes conservarlo en la nevera hasta 15 días, siempre y cuando respetes el alimento, ya que aunque sea una verdura bastante resistente, no le gustan los cambios de temperatura bruscos.
Al contener gran cantidad de agua, el frío excesivo puede llegar a congelarlo, así que debemos mantenerlo lejos de las paredes más frías del frigorífico. Tampoco le conviene el exceso de humedad, ya que puede pudrirse.
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